DIARIO DE CUARENTENA
CAPÍTULO
xXxI
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Ayer terminé
mencionando a mi madre y hoy voy a empezar mencionándola otra vez.
Mi madre, de nombre
Dulce, decía que yo era de lágrima fácil.
Mis alumnas y
alumnos me han visto emocionarme en clase más de una vez. Así que no voy a
decir nada que no se sepan.
En estos últimos
treinta días más o menos no hay día que no llore a “lágrima viva”, como dicen
en mi pueblo, allá en la Sierra de Segura.
Y tengo motivos,
muchos motivos.
La culpa, o el origen,
está en todas las cosas que oigo y las que supongo.
Digo oigo pues es, después de hablar con la familia, cuando no puedo contenerme y lloro lo que no está escrito y luego me emociono con cualquier cosa.
(Lógicamente
debería mear poco, ya que lloro mucho, pero algo falla pues voy al baño igual
que antes.)
Mi familia, por
parte de madre, cómo no, es tradicionalmente una familia de maestros. Somos
siete maestros entre veinte primos y primas.
Pero ahora, con la
llegada de sobrinos, la vocación ha cambiado a la rama sanitaria.
Hospital de
Albacete. Hospital de Parapléjicos de Toledo (ahora reconvertido en general
para acoger excedentes de Madrid). Hospital de Jaén. Hospital de Murcia.
Hospital de Antequera y Geriátrico en Madrid.
Vaya tela.
Todos los días
tengo montones de motivos para enfadarme: al oír las noticias sobre el
coronavirus; por las mentiras que nos cuentan; por los fallecidos y por los
que vendrán; por la familia que trabaja en hospitales sin medios, pero con
miedo; por la economía, por el desastre de economía que llegará; por mis
hijos despedidos de sus trabajos; por mi hermano camionero sin trabajo desde
hoy…
Tengo muchos
motivos para llorar: al salir a aplaudir; al hablar con “mis sanitarios”; por
ENRIQUE, PATRI, MARI, BEGO, MERCEDES y PEPE; al pensar en el futuro de todos;
en mis niños y niñas que no los veo y no sé si los veré; por lo que lo que me
estoy perdiendo con ellos; por todas las familias de 6º A que son CAMPEONAS,
por el gran esfuerzo y trabajo que están haciendo…
Tendré que parar
para no mojar las teclas del ordenador.
Querido diario. ENRIQUE, PATRI, MARI,
BEGO, MERCEDES y PEPE.
Mañana más.
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martes, 14 de abril de 2020
DIARIO DE CUARENTENA. Capítulo XXXI
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